Una de las cosas más difíciles cuando viajas, a veces, es mantener tu mente tranquila y en calma. Bueno, lo es no sólo cuando viajas. Les comparto mi experiencia para mantener mi mente en paz mientras viajo por largos periodos de tiempo.
Viajar es un estilo de vida. Ser viajero y no turista significa adaptarse, vivir y respetar la cultura local. Es para quienes amamos la libertad de movernos, de ir a lugares que nunca hemos ido, de comer comidas que nunca has probado antes, de conocer personas con experiencias diferentes a las tuyas que te aportan nuevas formas de ver y enfrentar la vida.
Viajar solo, es sólo para algunos creo. No todos disfrutan de manejar sus tiempos, ritmos y actividades. Algunos prefieren compartir sus viajes con otros y es rico poder compartir con alguien querido las aventuras de cada día. Pero si no tienes ese placer y el deseo de viajar es mayor el viajar solo es una opción muy viable y para muchos, la primera opción.
El viajar por largo tiempo no es para todos, hay quienes gustan de la rutina de un trabajo de oficina, o de saber exactamente qué harán casi cada día de la semana y dónde. Para los que nos motiva la variedad, el no saber dónde dormirás en unos días más, o qué cenarás en unas horas, con quién entablarás la siguiente conversación, el viajar es parte de nuestras vidas y si puedes hacerlo por un periodo de tiempo prolongado puede llegar a ser una de las experiencias más ricas de tu vida.
Para muchos uno de los puntos más sensibles al viajar es el no poder estar junto a sus amigos o familias. Sobre todo para nosotros los latinos, la cercanía y contacto constante con la familia y amigos es un punto por el que muchos sufren con la idea de irse de viaje por más de unas semanas. Yo agradezco cada día a las redes sociales que me permiten tener comunicación en vivo con todos mis seres queridos. Ello me mantiene en contacto con ellos y no necesito estar en persona para compartir con ellos. Los que más extraño son mis perros con los cuales no puedo comunicarme a través de mi computadora. Viajando conocerás muchas personas, yo he hecho grandes amistades con quienes he conocido en mis viajes y muchas de las personas más importantes en mi vida son viajeros como yo.
Aceptar la cultura local puede ahorrarte muchos problemas, malos entendidos y malos momentos. Siempre que viajes mírate como un extraño en un lugar al cual no perteneces y recordarás que eres tú el que tiene que mirar lo que sucede en ese lugar como una visita. Si observas algo con lo que no estás de acuerdo, siempre recuerda que ellos son quienes viven en ese lugar, es su cultura, sus costumbres y no eres tu quién para juzgar la cultura de otros sin primero entender el contexto en que suceden. Así también, intenta adaptarte al lugar en cuanto a códigos de vestimenta, formas de saludo y normas sociales que harán que seas percibido si no como un local, como un viajero respetable y respetuoso.
La herramienta que más me ha ayudado a mantenerme en calma y centrada aún en las situaciones más complicadas ha sido la meditación. Es una herramienta que ha servido a muchos durante miles de años y existen innumerables técnicas que pueden acomodar a todos. Busca alguna escuela respetada y conocida e intenta encontrar un profesor con experiencia que te ayude a explorar ese camino. Siempre es mejor bajo la guía de otra persona ya que la meditación muchas veces es también un viaje hacia ti mismo y no siempre es tan sencillo enfrentarse a uno mismo. Durante mi viaje a India conocí la técnica Vipassana en un retiro de 10 días, que si bien, fue una de las experiencias más difíciles de mi vida ha sido una de las que me ha dejado más enseñanzas y una herramienta que intento usar lo más posible. La diferencia entre los periodos en que medito más a menudo y los que no son enormes, y sobre todo me encuentro mucho menos ansiosa y concentrada que de costumbre.
¿Tienes tus propios tips acerca de cómo mantener tu mente en calma mientras viajas?
Muy lindo post! Realmente ahora me encuentro en modo ahorrar plata para poder irme. Nose si será lo mio o no pero por ahora sueño con irme de viaje sola para descubrirme a mi misma y con mis formas y tiempos. Seguramente voy a necesitar de la meditación en algún momento jaja.
Un saludo
Carla